Pirotecnia: Una tradición que se debe erradicar
APROA, como todos los años, reitera los terribles efectos de la pirotecnia, tanto para la fauna doméstica como para la fauna silvestre, y su impacto negativo en los seres humanos. Por tal razón, nos unimos a la campaña «Navidades y Año Nuevo sin Pirotecnia».
Impacto Negativo en Mascotas
El estruendo de los fuegos artificiales provoca un intenso miedo y ansiedad en perros, gatos y otras mascotas. Estos ruidos fuertes pueden llevar a comportamientos de pánico como temblores, ladridos, maullidos excesivos y, en algunos casos, intentos desesperados de escapar, resultando en posibles lesiones o pérdida de las mascotas.
Daños a la Fauna Silvestre
Los fuegos artificiales no solo afectan a las mascotas. La fauna silvestre también sufre considerablemente. Las explosiones y luces brillantes desorientan a los animales, alterando sus patrones naturales de comportamiento, alimentación y migración. Además, el estrés inducido por el ruido puede provocar respuestas de pánico, que a menudo resultan en lesiones o incluso en la muerte de estos animales.
Efectos en Seres Humanos y el Medio Ambiente
Los fuegos artificiales también pueden ser perjudiciales para los seres humanos, especialmente para aquellos con condiciones de salud como ansiedad, trastorno de estrés postraumático (TEPT) y problemas cardíacos. Además, la pirotecnia libera productos químicos tóxicos y partículas contaminantes en el aire, afectando la calidad del aire y contribuyendo a la contaminación ambiental.
¿Qué hacer?
Los fuegos artificiales silenciosos son una opción que reduce significativamente el estrés en animales. Las celebraciones navideñas pueden ser alegres sin necesidad de recurrir a fuegos artificiales tradicionales. Al optar por alternativas más seguras, podemos proteger a nuestras mascotas, a la fauna silvestre y al medio ambiente, garantizando unas fiestas felices y seguras para todos.