Noticias

SOS Toninas ¡A menos de una semana de la muerte de Zeus, fallece Dalila!

El pasado miércoles 15 de junio se supo de la muerte de Dalila, la última tonina del acuario de Valencia. Dalila murió de un paro respiratorio a sus 48 años. El jueves de la semana pasada falleció “Zeus” de 11 años de vida.

Aunque se conoció que la tonina murió por un paro respiratorio, el diagnóstico todavía no es claro.

La muerte de estos hermosos e inteligentes animales ha levantado la polémica sobre el sufrimiento de estos mamíferos en cautiverio.

El delfín del Amazonas o del Orinoco, Inia geofrensis (también llamado delfín rosado, tonina, boto o bufeo) es el delfín de agua dulce más grande que existe y vive en las aguas pantanosas y rápidas del Orinoco, en sus ambarinos afluentes y en las aguas claras de los ríos Negro y Ventuari.

tumblr_le69wtu8d11qadfyoo1_500

Se las puede encontrar en toda la cuenca del Orinoco y Amazonas, llegando a Colombia, Brasil, Guyana, Bolivia y Perú. La variedad que se encuentra en nuestro Orinoco se denomina Inia geofrensis humboldtianay se considera una especie en estado vulnerable de conservación.

Es bastante longeva dentro de los mamíferos y su presencia dentro de un ecosistema acuático es un indicador de salubridad del agua, es decir, un ecosistema donde hay baja densidad de toninas u otras especies animales y vegetales, indica que el estado de salud de esos cuerpos de agua es bajo.

Otro de los problemas es la sobrepesca. Los animales mueren, de forma accidental, por ahogamiento en redes al igual que muchas otras especies incluso en altamar. También está el conflicto con las construcciones de diques para represas que causan la fragmentación del hábitat y el flujo de especies.

Por otro lado encontramos la alteración del hábitat por navegación de grandes embarcaciones, que se puede observar en el bajo Orinoco, desde Puerto Ordaz y hasta el Delta. Y, finalmente, la contaminación de los ríos por agroquímicos y afluentes de la industria de áreas urbanas. Ya se ha demostrado en estudios que hay peces que presentan concentraciones de mercurio como consecuencia de la explotación minera.

Una prisión para nuestras toninas

En 1975 llegaron al Acuario de Valencia, Juan Vicente Seijás, 3 toninas capturadas en el Río Apure. La población llegó hasta 14 toninas, con 3 nacidas en cautiverio.

Su trágica captura se hizo siguiendo el cruel procedimiento de arrinconarlas en un caño poco profundo, sacándolas con una red. Se les transportó durante 12 horas de Apure a Valencia en unas hamacas sobre un camión de estacas con un toldo y se les rociaba con agua cada tanto para que su piel conservara humedad y temperatura entre 35 y 36 grados. Fue un viaje muy difícil porque aunque respiraban aire por ser mamíferos, sufrían de mareos al no poder mantenerse a flote.

Entre 1975 y 1985 murieron 8 toninas por varias razones: estrés, neumonía, enfermedades relacionadas con gusanos parasitarios, machos que se atacaron cuando se los puso en el mismo estanque, infecciones y enfermedades gástricas por la ingestión de piedras, llaves, monedas y otros objetos lanzados por el público.

En octubre de 2010, el Ministerio del Poder Popular para el Ambiente anunció que se trasladarían dos toninas nacidas en el acuario de Valencia a Corea de Sur para dar cumplimiento al convenio de cooperación para especies acuáticas, recibiendo a cambio la reestructuración del toninario dando solución al asinamiento que sufrían las toninas.

Sin embargo, esta decisión quedó sin efecto al morir la tonina Ulises en febrero de 2011 debido a una afección respiratoria, quedando sobrevivientes Dalila, Zeus, Helena, Artemis y Penélope. Esta última murió en marzo de 2011 presentando un cuadro de gastritis y estrés emocional por la pérdida de su pareja Ulises. Por su parte, Artemis, la tonina más joven del acuario y sustituta de Penélope para la reproducción murió a causa de una infección bronconeumónica y hepática.

La reciente muerte de Zeus y Dalila reitera el debate sobre la crueldad de mantener en cautiverio a estas especies en peligro de extinción, ya que la triste vida a las que se les confina no asegura la continuidad de esta especie seriamente amenazada por la depredadora existencia humana.

Se cree que son capturados unos 30 mil delfines al año para confinarlos en Acuarios, incluyendo hembras preñadas y crías, de los cuales mueren 2 por cada uno que sobrevive, el cual tampoco tendrá larga vida, pues creadas para la libertad, estas criaturas no soportan el cautiverio.

A continuación compartimos un vídeo que expone la triste vida de los defilnes y orcas en los acuarios.

Ante la tragedia de las toninas del Acuario de Valencia recordamos que en Venezuela existe el artículo 127 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y la Ley 22.344 sobre Aprobación de la “Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres”, que protegen la existencia en libertad de nuestros hermosos Delfines del Orinoco.

delfin-del-amazonas

Mientras que el Artículo No. 4 de la Declaración Universal de los Derechos de los Animales, expresa:

a) Todo animal perteneciente a una especie salvaje tiene derecho a vivir libre en su propio ambiente natural, terrestre, aéreo o acuático y a reproducirse.

b) Toda privación de libertad, incluso aquella que tenga fines educativos, es contraria a este derecho.

Esta declaración fue adoptada por La Liga Internacional de los Derechos del Animal en 1977, que la proclamó al año siguiente. Posteriormente, fue aprobada por la Organización de Naciones Unidas (ONU) y por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *